top of page
Arendy Ávalos

Siempre tendremos el mar

Para S sin acento


Nunca olvidaré la primera vez que escuché tu voz. Tampoco la primera vez que confiaste en mí cuando te pregunté por tu historia de amor más triste. Si te preguntara lo mismo hoy, ¿qué contestarías?


Me llenaste el pasado de alegrías y quiero pasmar aquí la certeza de que esas sonrisas no se quedarán guardadas, empolvándose en alguno de los tantos rincones que visitamos juntas.


He decidido dejarte ir y obligar a mis pies a no dar un solo [primer] paso más. Decirte adiós porque ya no puedo pedirte —ni una vez más— que te quedes.


Estoy cansada de ser pieza rota y el pegamento que intenta rellenar las grietas entre tú y yo. Así que quiero deshacerme de la esperanza de que regreses.


Dejaré la puerta y las ventanas abiertas de par en par, en lugar de emparejarlas, para que vueles tan alto como quieras, para que no te sientas atada, para darte calma.


Ojalá que dejes un espacio en tu pecho para lo que fuimos y que también pienses en mí cuando escuches Las flores.


Me quedo tranquila porque sé que nuestras carcajadas se escucharán con cada corriente de aire, que serán el relámpago que despierta a la ciudad entera en plena madrugada.


Zarpamos de nuestra isla y, aunque navegaremos rutas distintas, siempre tendremos el mar.






122 visualizaciones

Comments


Entradas destacadas
Archivo de entradas
Encuéntrame en: 
  • Twitter Basic Square
  • Blogger Social Icon
  • Instagram Social Icon
  • Google+ Social Icon
bottom of page